¿Acaso no es hora de que los corazones de los creyentes se sometan con humildad a la mención y glorificación de Al-lah y a la verdad que ha revelado para que no sean como quienes recibieron las Escrituras con anterioridad, cuyos corazones se fueron endureciendo con el paso del tiempo? Y muchos de ellos fueron rebeldes (al desobedecer a Al-lah).
Cuántos corazones llevan tanto tiempo alejados del recuerdo de Al-lah, hasta secarse y endurecerse, y aun así el mensaje divino sigue llamando a su puerta … ¿Acaso no ha llegado el momento para que se humillen ante Al-lah?
¿Acaso no es hora de que los corazones de los creyentes se sometan con humildad a la mención y glorificación de Al-lah y a la verdad que ha revelado para que no sean como quienes recibieron las Escrituras con anterioridad, cuyos corazones se fueron endureciendo con el paso del tiempo? Y muchos de ellos fueron rebeldes (al desobedecer a Al-lah).
La negligencia endurece los corazones, y el recordar a Al-lah los suaviza y los revive. No esperes a que la vida mundanal te apague… vuelve ahora.
Recita (¡oh, Muhammad!) lo que te ha sido revelado del Libro (el Corán; obra según él y transmítelo a los demás) y realiza el salat. En verdad, (la práctica constante) del salat evita (que el hombre caiga en) la inmoralidad y en las malas acciones. Y glorificar a Al-lah (dentro y fuera del salat) es más importante (que el resto de las buenas acciones). Y Al-lah sabe lo que hacéis.
El Corán se recita para refinar el alma, y la oración se establece para purificar la conducta. Quien mantiene la conexión con su Señor, es protegido del desvío.
Recita (¡oh, Muhammad!) lo que te ha sido revelado del Libro (el Corán; obra según él y transmítelo a los demás) y realiza el salat. En verdad, (la práctica constante) del salat evita (que el hombre caiga en) la inmoralidad y en las malas acciones. Y glorificar a Al-lah (dentro y fuera del salat) es más importante (que el resto de las buenas acciones). Y Al-lah sabe lo que hacéis.
No hay nada en el mundo más grandioso que estar siempre consciente de Al-lah, pues es luz para el corazón, freno para el ego, y el medio que nos lleva hacia la firmeza. Cuanto más Lo recuerdas con sinceridad, más cerca estás.
(Este Corán es) un Libro bendito que te hemos revelado para que (los hombres) mediten sobre sus aleyas y para que reflexionen los hombres de buen juicio.
El Corán no es un adorno ni un objeto para buscar bendición, sino que descendió para comprenderlo, reflexionar sobre él y seguir su guía en cada situación.
(Este Corán es) un Libro bendito que te hemos revelado para que (los hombres) mediten sobre sus aleyas y para que reflexionen los hombres de buen juicio.
Cada aleya en el Corán lleva un mensaje, y quien usa su mente y su corazón para entenderlo, sale con luz y una visión clara.
Y, ciertamente, os pondremos a prueba mediante el miedo, el hambre, pérdidas de bienes y pérdidas de vidas o de frutos. Y anuncia (¡oh, Muhammad!) buenas noticias a quienes sean pacientes;
Las pruebas no son señales de la ira divina, sino una oportunidad para que los pacientes se eleven. El miedo, el hambre, la pérdida… todas son lecciones de confianza en Al-lah.
Y, ciertamente, os pondremos a prueba mediante el miedo, el hambre, pérdidas de bienes y pérdidas de vidas o de frutos. Y anuncia (¡oh, Muhammad!) buenas noticias a quienes sean pacientes;
Puede que las circunstancias se estrechen para ti, y que el mundo te quite algo de tus bienes o a alguien que amas, pero quien tiene paciencia y se complace con su destino, obtiene la buena nueva divina.
¡Oh, creyentes!, buscad ayuda en la paciencia y en el salat. En verdad, Al-lah está con los pacientes.
Cuando las crisis se intensifican, no busques primero una salida exterior, sino recurre a la paciencia y a la oración… pues en ellas está la ayuda del cielo.
esos que, cuando se ven afectados por una calamidad, dicen: «En verdad, pertenecemos a Al-lah y a Él es nuestro retorno».
En los momentos de calamidad, no se dicen muchas palabras, basta con repetir desde lo más profundo de tu ser: «Pertenecemos a Al-lah, y a Él regresaremos». Hay en ello entrega, complacencia y tranquilidad.
esos que, cuando se ven afectados por una calamidad, dicen: «En verdad, pertenecemos a Al-lah y a Él es nuestro retorno».
Toda pérdida, toda tristeza, toda calamidad… por muy grande que sea, sigue siendo más ligera cuando recuerdas que estás en el camino de regreso hacia Quien te creó.
El Clemente.
Ha enseñado el Corán.
Ha creado al hombre
y le ha enseñado a hablar con elocuencia (y a pronunciar con corrección).
El Corán fue la primera bendición después de la misericordia, porque lo más grandioso que se enseña al ser humano tras su creación es la palabra de Al-lah.
¿Es que no meditan sobre el Coráno tienen el corazón (y la mente) completamente cerrados(y no pueden reflexionar sobre sus aleyas)?
El Corán no es un libro que sólo se lee, sino que se reflexiona… Quien no medita en sus significados, es como si tuviera un candado en su corazón que no se abre.
Ciertamente, este Corán guíahacia lo que es más justo y recto y anuncia a los creyentes que obran con rectitud que obtendrán una gran recompensa (en la otra vida).
El Corán te guía al camino más recto, no solo con órdenes y prohibiciones, sino con un método de vida completo que te conduce a la salvación y la felicidad.
Ciertamente, este Corán guíahacia lo que es más justo y recto y anuncia a los creyentes que obran con rectitud que obtendrán una gran recompensa (en la otra vida).
La gran buena nueva para los creyentes no está solo en palabras, sino en una promesa de Al-lah de una gran recompensa para quien sigue el camino de la rectitud.
Y si hubiéramos hecho que este Corán fuera en lengua extranjera, (los idólatras de entre los árabes) habrían dicho: «¿Por qué sus aleyas no han sido explicadas (en lengua árabepara que lo podamos entender bien)?». ¿(Un libro) en lengua extranjera cuando (el Profeta) es árabe? Diles (¡oh, Muhammad!): «Para los creyentes, este Corán es una guía y una cura»; y quienes no creen en él tienen taponados los oídos (y no pueden ni escucharlo ni comprenderlo); están ciegos con respecto a él (y no pueden seguirlo). (Se asemejan a) quienes son llamados de un lugar lejano (y no pueden oír la llamada ni responder a ella).
El Corán no es exclusivo de una lengua o un pueblo, sino que es guía y cura para todo corazón que cree; y quien se aparta de él, pone entre sí mismo y la verdad una distancia infranqueable.
Y si hubiéramos hecho que este Corán fuera en lengua extranjera, (los idólatras de entre los árabes) habrían dicho: «¿Por qué sus aleyas no han sido explicadas (en lengua árabepara que lo podamos entender bien)?». ¿(Un libro) en lengua extranjera cuando (el Profeta) es árabe? Diles (¡oh, Muhammad!): «Para los creyentes, este Corán es una guía y una cura»; y quienes no creen en él tienen taponados los oídos (y no pueden ni escucharlo ni comprenderlo); están ciegos con respecto a él (y no pueden seguirlo). (Se asemejan a) quienes son llamados de un lugar lejano (y no pueden oír la llamada ni responder a ella).
Los corazones son los que entienden, no los oídos… Quien abre su corazón a la verdad, encuentra en el Corán luz, y quien lo cierra, no escuchará aunque se le reciten todas las aleyas.